Los Grupos de Acción Local de Salamanca arriman el hombro en el Proyecto AIRE

La realidad no miente. España es el país más despoblado del sur de Europa. Sin embargo, lejos de tirar la toalla, los Grupos de Acción Local creen que existen alternativas para frenar el éxodo de nuestros pueblos e, incluso, provocar un efecto llamada en los mismos.

Con esa mentalidad nace el Proyecto Aire (Apoyando Iniciativas de Repoblación y Emprendimiento) en el que doce Grupos de Acción Local de las provincias de Ávila, Burgos, León, Palencia, Salamanca, Segovia y Valladolid trabajan mano a mano para frenar la despoblación de sus territorios en el marco del Programa de Desarrollo Rural de Castilla y León  2014-2020.

Para los Grupos de Acción Local que participan en este proyecto, la despoblación y sus consecuencias en la economía y en la sociedad rural aboca al medio rural al silencio demográfico, por lo que se hace imprescindible diseñar y ejecutar una estrategia conjunta.

Juan Ignacio Alonso Canuto, de ADECOCIR; José María Herrero, en representación de ADEZOS; Ángel Muñoz Salazar, de ADRECAG y Manuel Arias Rodríguez, de ADRISS, reflexionaron sobre la actual situación de nuestro entorno rural bajo un mismo prisma, el del pesimismo ante ese mal común, la falta de habitantes, que algunos se atrevieron a tildar de “abandono” pues son muchas las localidades cuya densidad de población no alcanza los siete habitantes por kilómetro cuadrado. Por ello reclamaron, incluso, medidas de discriminación positiva para estos territorios.

Entre las recetas para poner coto a la salida de los pueblos han apuntado al hecho de potenciar las industrias agroalimentarias de estas zonas junto a un aumento de la dotación económica del desarrollo rural en la PAC “para que la gente se pueda quedar en los pueblos viviendo de su trabajo, no de subvenciones”.

Coinciden los expertos en señalar que la ruralidad del siglo XXI va a ser muy diferente pues se imponen formas de vivir “asociadas a trabajos artesanos, medioambiente, nuevas tecnologías, servicios…”. En ese contexto se pone en marcha el Proyecto AIRE “para responder a la demanda de gente que quiere venir a vivir a los pueblos”, explicó Nieves Matías, quien también especificó que no existe enfrentamiento entre lo rural y lo urbano. “Somos diferentes pero complementarios”, precisó.

A través de la web del proyecto (https://cooperacionaire.es/), los usuarios tienen acceso a un amplio menú de recursos entre los que se encuentran ofertas de empleo en el medio rural, ejemplos de éxito, guías de adaptación al entorno e, incluso, una relación de tierras, locales y viviendas disponibles. Ese ejemplo de cooperación se traslada además a las redes sociales, donde AIRE tiene también una presencia muy activa.

El objetivo final de la iniciativa es el de “darle una vuelta” a la situación actual a través de la innovación, una forma de no rendirse ante una tendencia que amenaza la supervivencia de miles de localidades en Castilla y León.