Una mesa redonda aborda los cambios con la nueva normativa de finales de 2022 y cuáles son las funciones y responsabilidades del veterinario de explotación.
Salamaq ha acogido esta mañana, dentro de sus jornadas profesionales, los VI Encuentros Profesionales del Vacuno de Carne que este año llevaban como título ‘2024 qué nos espera: Ley de Ordenación de Explotaciones Bovinas y figura del veterinario de explotación’.
Este encuentro, que ha sido presentado por Constantino Álvarez Díez, del Servicio Técnico de Rumiantes de Carne de NANTA Castilla y León, ha consistido en una mesa redonda, que ha contado con su participación junto a la de Laura Elvira Partida, técnico de rumiantes de la empresa MSD, que lleva tiempo tratando estos temas; de Agustín Vicente Román, presidente de la Asociación de Veterinarios de Producción Animal de Salamanca (Veproasa); y de Lucía Teresa Díez Córdova, técnico de Asoprovac, que conoce bien la ley de ordenación de explotaciones bovinas.
Conocer los cambios de la nueva Ley de Ordenación de Explotaciones de Ganado Vacuno, que salió a finales de 2022, y cómo va a quedar instaurada la figura del veterinario de explotación, que a partir del año que viene va a ser obligatoria no sólo para vacuno sino para todas las especies, han sido los dos temas que han centrado la mesa redonda.
Con la nueva ley se ha dado una nueva catalogación de las explotaciones y se obliga a algunas de ellas a presentar un sistema integral de gestión, que ya existe en otras especies, y un plan de sanidad integral. Pequeñas cosas que conllevan más burocracia. Hay que tener en cuenta, ha explicado Constantino Álvarez, que cada vez más está implantado el concepto de ‘wear health’, que eso implica que hay que cuidar más la salud de los animales y el bienestar animal; aunque ha destacado que el bienestar está implantado desde hace muchos años, “nadie le cabe en la cabeza que no mire por el bienestar de sus animales, porque sino no producen”; pero ahora van a estar más legislados los diferentes criterios, van a englobar ciertas cosas y va a haber más control en la emisión de gases, en el efecto invernadero… Cuestiones que se van a mirar más a partir del año que viene y «queremos ver cómo nos afecta, a qué cosas nos tendremos que acostumbrar».
Con la nueva normativa, no son muy diferentes las exigencias que se piden al vacuno de carne respecto a otras especies; es más, a algunas como el porcino, ya se les ha exigido lo mismo con anterioridad. La verdad es que no se va a pedir nada que no se pueda cumplir, lo único es que supone más papeleo para el ganadero.
VETERINARIO DE EXPLOTACIÓN
Sobre la figura del veterinario de explotación se ha estado viendo qué funciones va a tener, qué responsabilidades… porque hasta ahora hay muchas explotaciones que no tienen un veterinario como tal, que sea el responsable de la sanidad de sus animales, y a partir de ahora ya va a ser necesario, aunque la ley no especifica de cuántas cabezas de ganado puede hacerse cargo un veterinario, pero sí va a tener que quedar registrado qué veterinario es el responsable, algo que habrá que comunicar a las autoridades administrativos. Será también el encargado de realizar el plan sanitario integral.
Por último, en el encuentro han querido hacer hincapié en un mensaje que llevan repitiendo desde hace años y más en una época como la actual -un poco complicada por la tuberculosis y por la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica- y es que el sector tiene que profesionalizarse. El vacuno de carne es el segundo sector en importancia en lo que se refiere a productos cárnicos de España, y continuar ahí hace necesario profesionalizarse, algo que requiere ciertos registros, ciertas trazabilidades que hay que tener presentes para que el producto que llega al consumidor final o que se destina a la exportación tenga realmente garantías y éstas se puedan demostrar.